Fecha del informe 12 Dic 2024
Interacción del caso reportado entre
Tenofovir-DF y Clarithromycin
Tenofovir-DF y Clarithromycin
Fármacos implicados
Lista completa de los medicamentos que toma el paciente
14-days course with clarithromycin (500 mg BID), lansoprazole (30 mg BID), amoxicillin (1000 mg orally BID)
Descripción del caso clínico
Varón caucásico de 52 años en tratamiento antirretroviral (TAR) con raltegravir (400 mg BID) y emtricitabina/tenofovir disoproxil fumarato (200/300 mg QD) desde 2019. Mantiene una carga viral de VIH indetectable y un recuento de células T CD4+ por encima de 800 células/mm³.
En 2023, se le diagnosticó una infección por Helicobacter pylori y se le prescribió un régimen de erradicación de 14 días, que incluyó claritromicina (500 mg BID), lansoprazol (30 mg BID) y amoxicilina (1000 mg BID). En el décimo día del tratamiento de erradicación, su carga viral de ARN del VIH permaneció indetectable.
En este caso no se observaron interacciones farmacológicas clínicamente significativas entre la claritromicina y su régimen actual de TAR (raltegravir/emtricitabina/tenofovir disoproxil fumarato). Sin embargo, es importante que los clínicos tengan en cuenta que la claritromicina es un potente inhibidor del CYP3A4 y de la glicoproteína P (P-gp), lo que podría aumentar la absorción de tenofovir disoproxil fumarato. Esto podría resultar en concentraciones sistémicas elevadas de tenofovir, aumentando potencialmente sus efectos secundarios, especialmente a nivel renal. Por lo tanto, se recomienda un control estrecho de la función renal.
Resultado clínico
Comentario del comité editorial
Este caso resalta la importancia de investigar posibles interacciones farmacológicas, incluso cuando no parecen evidentes a primera vista. Aunque la mayoría de las interacciones están mediadas por la inhibición o inducción de las isoenzimas del CYP450, una proporción significativa surge de la inhibición o inducción de los transportadores renales o intestinales.
En este caso específico, una interacción clínicamente significativa que involucre a la claritromicina mediante la inhibición de CYP3A4 es poco probable, ya que el tenofovir disoproxil fumarato (TDF) no utiliza esta vía para su metabolismo. Sin embargo, el TDF es un sustrato de la glicoproteína P (P-gp), un transportador intestinal y renal. Los inhibidores de P-gp, como la claritromicina, podrían potencialmente aumentar la absorción de TDF, lo que llevaría a concentraciones sistémicas elevadas.
En el presente caso, la duración del tratamiento con claritromicina fue sólo de 14 días, por lo que un impacto clínico del posible aumento en la absorción de TDF fue improbable. Sin embargo, en situaciones donde la duración del tratamiento con claritromicina sea más prolongada (por ejemplo, terapia para micobacterias atípicas), la exposición prolongada a niveles elevados de tenofovir podría provocar deterioro de la función renal. En estos casos, se recomienda un control estrecho de la función renal o considerar el cambio a un régimen antirretroviral que no incluya TDF.